En el primer episodio de Espacios que hablan by U Interior Design, Laura Huerta, Directora de Interiorismo en U Interior Design, conversó con Llanos Espinosa, Consultora de Inversión y Operadores Hoteleros. Durante la charla, se exploraron los grandes desafíos en la creación de proyectos hoteleros, destacando la naturaleza dinámica y en constante evolución de estos espacios.
Llanos Espinosa compartió una profunda reflexión sobre el proceso de diseño y la sensación que queda cuando un proyecto llega a su fin. Aunque completar un hotel puede ser una experiencia gratificante, también deja una sensación de vacío, una especie de nostalgia por el proceso creativo. Con tantos proyectos en marcha año tras año, no siempre hay tiempo para detenerse y reflexionar sobre cada detalle, pero el vínculo emocional con el trabajo realizado es innegable.
Sin embargo, en el mundo de los hoteles, un proyecto nunca está realmente terminado. A menudo, los operadores regresan con nuevas ideas y necesidades, como añadir detalles inesperados. Esto subraya la idea de que los hoteles son seres vivos, en constante cambio, que siempre ofrecen algo más por hacer.
Uno de los aspectos más fascinantes del trabajo de diseño hotelero es la oportunidad de ver cómo un espacio evoluciona con el tiempo. Laura Huerta destacó la importancia de visitar un hotel uno o dos años después de su apertura para evaluar cómo ha envejecido el diseño, qué aspectos han funcionado bien y cuáles no. Esta observación directa es crucial para mejorar y aplicar esos aprendizajes en futuros proyectos. Aunque el papel soporta cualquier idea, solo la operación y el uso diario revelan realmente el éxito de un diseño.
Además, el ritmo acelerado de la industria y la constante aparición de nuevos materiales y tecnologías no siempre permiten evaluar a fondo su durabilidad o adecuación. Solo con el tiempo y la experiencia se puede determinar si una elección de diseño fue la correcta, lo que añade otra capa de complejidad a este trabajo.
Al responder una pregunta de la comunidad sobre las diferencias en reposicionar un hotel de más o menos estrellas, Llanos Espinosa aclaró que, aunque todos los proyectos deben aspirar a una calidad muy alta, la categoría del hotel influye en la inversión destinada. Esto no solo afecta la magnitud del proyecto, sino también las expectativas y el enfoque que se le da a cada detalle.
Si te apasiona el diseño hotelero o simplemente quieres profundizar en cómo estos espacios cobran vida y evolucionan, te invitamos a verlo aquí.